“Queremos ser la voz autorizada en temas ambientales”

El presidente del Colegio de Profesionales del Ambiente de Neuquén (CPAN), Martín Islas, confirmó el compromiso de la entidad con el avance de energías sustentables y el cuidado ambiental frente al cambio climático.


El CPAN está trabajando fuertemente en la conformación de un equipo de profesionales comprometidos con la sociedad para transmitir la importancia del cuidado ambiental, más allá de la visibilidad mediática.

El objetivo es realizar un trabajo de campo en diferentes organismos estatales para llevar adelante una formación integral en ambiente a funcionarios públicos. En este sentido, el Colegio ya cuenta con el apoyo de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), que aportará un respaldo académico y en conjunto avanzan en la creación del plan de estudios.

Por su parte, la Municipalidad de Neuquén ya dio su visto bueno y firmaron un convenio, por lo que funcionarios municipales serán capacitados por profesionales del ambiente sobre la ley Yolanda. Además el Colegio recibirá un lote en comodato para construir “nuestra sede, la idea es tener oficinas, un gran auditorio y una especie de coworking para nuestro matriculados”, expresó Martín Islas, licenciado en Saneamiento y Protección Ambiental.

José Gerez, Fiscal del Tribunal Superior de Justicia, y Martín Islas, presidente de CPAN, firmando el convenio de cooperación.

Otro de los eslabones conquistados fue el Poder Judicial que ya accedió a esta iniciativa y se compromete a trabajar en conjunto sobre: La promoción y desarrollo de actividades conjuntas vinculadas al tema ambiental; asistir y asesorar técnicamente al Ministerio Público Fiscal en la materia que compete al CPAN; organización de cursos, seminarios y jornadas de capacitación que faciliten oportunidades de discusión e intercambio de experiencias.

Por el momento, no han podido concretar el acuerdo con el Poder Legislativo, pero es el próximo paso a dar. Por otro lado, existe un inconveniente con el Poder Ejecutivo del que no han recibido respuestas aún, pero confían en que se abrirá esa puerta también.

La Ley n.º 27592, también llamada Ley Yolanda establece que las personas que se desempeñen en la función pública en todos sus niveles y jerarquías en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Nación deben recibir una capacitación obligatoria en materia ambiental, con perspectiva de desarrollo sostenible y cambio climático.

“Nosotros somos como los traductores de los compromisos que Nación asumió de acá a diez años. Nuestra misión y desafío es que todos los matriculados puedan entender cuáles son los compromisos y poder transmitirlos a la sociedad. No vamos a esperar que los funcionarios o las empresas lo hagan, pueden tener todas las voluntades, pero no poseen las herramientas necesarias”, aseguró Islas a Energía Patagonia.

Las capacitaciones serán dirigidas por matriculados del CPAN quienes, en primer lugar, serán capacitados en el curso “Formador de Formadores”, que iniciará el próximo 10 de enero del 2022. La dinámica oscilará entre la presencialidad y la virtualidad y durará 10 días. El objetivo es que todos mantengan una línea de contenido al momento de capacitar. “Por lo que tengo entendido somos la primera provincia que encara este proyecto tan seriamente, en esto Neuquén tenía que estar a la altura”.

“Queremos ser la voz autorizada en tema ambientales, ser un respaldo para el Estado en consultas, en este sentido estamos asesorando al municipio con el parque solar. En octubre, el municipio de Neuquén firmó un convenio con la Cooperativa Calf apostando a la transformación de la matriz energética. El parque solar se desarrollará en un área de 100 hectáreas dentro de las 8.000 que son propiedad del municipio y se encuentran fuera del ejido municipal.


Derrame de petróleo en Rio Negro

El pasado 10 de diciembre se registró un derrame de petróleo en el yacimiento Medanito, cerca de Catriel, del que se confirmó que el volumen de crudo que llegó a la superficie fue de 3.200 metros cúbicos, lo que equivale a 3.2 millones de litros.

El derrame se produjo por la rotura de un caño de 16 pulgadas que en el momento del incidente transportaba crudo que se produce en el yacimiento y que tenía como destino Puesto Hernández. 

“Para mí no se hicieron los controles que se deberían haber hecho, la capacidad del caño estaba sobrepasada. El daño es irreversible, no va a volver nunca a las condiciones originales”, aseveró Islas.

La clave es el acompañamiento de la sustentabilidad y todo lo que trae la producción hidrocarburífera, el objetivo no es oponerse a la economía neuquina sino asegurar los controles necesarios para evitar desastres ambientales.