Horacio Marín reveló detalles sobre la venta de los bloques convencionales de la compañía. El directivo aseguró que hay 60 empresas interesadas en las áreas.

Horacio Marín, presidente y CEO de YPF, la principal empresa petrolera de Argentina, reveló nuevos detalles sobre el proceso de venta de activos de la compañía en el encuentro Vaca Muerta Insights. Allí, Marín compartió información detallada sobre el interés de las empresas en los activos de YPF, los plazos para la conclusión del proceso y los planes de la compañía para el desarrollo futuro.

Marín informó que hasta el momento, 60 empresas han mostrado interés en adquirir las áreas convencionales que YPF tiene a la venta en las provincias argentinas de Chubut, Santa Cruz, Neuquén, Mendoza, Río Negro y Tierra del Fuego. Este proceso de venta, denominado "Proyecto Andes", está siendo gestionado por el Banco Santander, que ya recibió una presentación inicial detallando las áreas en clústeres ubicados en diferentes regiones.

El presidente de YPF destacó que el objetivo es concluir este proceso de venta antes del 1 de septiembre, aunque admitió que podría ser incluso antes. Sin embargo, la finalización del proceso está sujeta a las aprobaciones necesarias por parte de las provincias involucradas. La intención de YPF de deshacerse de estas áreas convencionales responde a su estrategia de concentrarse en el desarrollo de Vaca Muerta.

Marín también abordó los desafíos actuales del sector, incluida la capacidad de evacuación de crudo, que ha sido un obstáculo importante. Sin embargo, se mostró optimista al afirmar que para el 1 de julio de 2026 se espera haber superado el cuello de botella de petróleo para Vaca Muerta, lo que permitirá un mayor desarrollo y producción en la región.

En cuanto a la estrategia de YPF para el futuro, Marín destacó el enfoque en proyectos de Gas Natural Licuado (LNG), que se espera sean colaborativos y permitan a Argentina exportar a nivel global y regional. Uno de estos proyectos contempla la exportación a través de un barco en Punta Colorada, Río Negro, en 2026, lo que marcaría un hito significativo en el desarrollo energético del país.

Además, Marín habló sobre la importancia de la eficiencia operativa de YPF, especialmente en el sector no convencional. Destacó que la compañía consiguió niveles de bombeo del 85% en áreas como la fractura, comparable con los estándares de Estados Unidos. Para mejorar aún más la eficiencia, YPF planea aplicar prácticas de la industria automotriz en la industria petrolera, con el objetivo de reducir costos y aumentar la competitividad: el modelo Toyota.

Además de la venta de activos, Marín destacó la importancia de la colaboración y asociación con otras empresas en la industria petrolera. Señaló que una de las alternativas que se barajan es la creación de nuevas Uniones Transitorias de Empresas (UTE) que presten servicios en campos convencionales, lo que permitiría a las empresas dar un salto de calidad y transformarse en operadores.

En términos de infraestructura, Marín hizo hincapié en la importancia de abordar los desafíos logísticos y de transporte que enfrenta la industria petrolera en Argentina. Destacó la necesidad de mejorar la capacidad de evacuación de crudo y de desarrollar una infraestructura sólida para apoyar el crecimiento del sector. En este sentido, mencionó proyectos como el Gasoducto Néstor Kirchner (GNK) y el proyecto Vaca Muerta Sur, que se espera contribuyan significativamente a la capacidad de exportación y producción de la industria.

Por último, Marín enfatizó el compromiso de YPF con la mejora continua y la eficiencia en todas sus operaciones. Señaló que la compañía está trabajando en programas para mejorar la productividad en las refinerías y en la implementación de procesos estandarizados en áreas como la perforación y la fractura. Estos esfuerzos buscan no solo aumentar la rentabilidad de YPF, sino también contribuir al desarrollo económico y energético de Argentina a largo plazo.